28/10/08

Pedro Orrente, el "Bassano español"

A pesar de ser murciano de nacimiento y de haber mantenido una vinculación con su patria a lo largo de toda su vida, debe ser considerado como toledano ya que será allí donde realice alguna de sus obras más significativas y su relación estilística con lo toledano es evidente. Pintor andariego, inquieto, casado sin hijos, tenebrista pues pinta contraluces intensos con fondos oscuros, alcanzará fama por sus trabajos en templos, conventos y palacios. Nació en torno a 1580 para iniciarse en el medio pictórico local años más tarde estando ya en 1600 en Toledo. Realizó por esas fechas un viaje a Italia que será decisivo para su formación. En Venecia frecuentó, tal y como relata Jusepe Martínez el taller de Leandro Bassano, una huella que estará presente en toda su obra posterior. En Toledo entablará una estrecha amistad con Jorge Manuel Theotocopuli, el hijo del Greco y desde allí realizará obras para lugares distantes como Yeste (Albacete) o La Murta (Valencia), lo que demuestra su prestigio. De Toledo se trasladará a Valencia en 1637 donde permanecerá hasta su muerte en 1645 siendo una de las personalidades más inquietas de este primer naturalismo español. En él está presente la influencia, a parte de los Bassano y de la pintura veneciana, del Greco, del pleno naturalismo caravaggesco e incluso de elementos escurialenses.

Es conocido como el “Bassano español” por sus numerosos lienzos de temas bíblicos interpretados como de género pastoril, con abundante presencia de animales y naturalezas muertas. De entre sus obras destaca el San Sebastián de la Catedral de Valencia, el Milagro de Santa Leocadia de la Catedral de Toledo; el Sacrificio de Isaac del Museo de Bilbao; el Martirio de Santiago el Menor del museo de Valencia; la Multiplicación de los panes y los peces del Ermitage de San Petersburgo; Familia de Jacob y Cabaña de la madrileña Academia de San Fernando o una media docena de cuadros y bocetos del Museo del Prado.

Pedro Orrente es una figura de primer orden entre los artistas de su generación. Sin faltar a la exactitud del dibujo sabía darle fuerza de claroscuro y brillantez. Su colorido es de casta valenciana especialmente en sus paisajes, donde suele haber efectos de luz dignos de Tiziano.Su presencia en Valencia será decisiva para la configuración del naturalismo valenciano.

1 comentario:

Javier dijo...

Qué buen aporte, y cómo se te nota el lenguaje opositor!!!