5/5/08

Juan Antonio Cebrián

Ya se ha escrito en esta Logia en varias ocasiones sobre el fallecimiento de personas ligadas a la cultura y casualmente a nuestro entorno. Por ello no quería dejar pasar la oportunidad de hacer un pequeño homenaje a Juan Antonio Cebrián, maestro y defensor de la cultura radiofónica e impulsor de mi progresiva adicción a la Historia.
Nos abandonó el 20 de octubre de 2007 de un ataque a su corazón, que dañó también los corazones la legión de noctámbulos seguidores ávidos del saber que dejó tras de sí.
A pesar de su juventud (41 años), Cebrián, amigo y admirador del también fallecido Jiménez del Oso, ya contaba en su haber con multitud de libros publicados, todos ellos enfocados a hechos históricos, y la mayoría elaborados como fruto de las interesantísimas tertulias radiofónicas y sobre todo de las secciones "Versus" y "Pasajes de la Historia", del programa que tantas horas de placer me ha proporcionado: La Rosa de los Vientos. La emoción también le arrastraba a él mismo cuando nos hablaba de genios de la talla de Napoleón Bonaparte, Julio César y, sobre todo, Alejandro Magno, de quien tomaría prestado el nombre para regalarselo a su hijo.
Pero su campo de actuación no se limitaba al hecho histórico, sino que, como si de un humanista se tratase, mostraba gran interés por los avances científicos, naturaleza, astronomía, etc., dejando también un espacio en su programa para otros ámbitos culturales como la música, el cine, los cómics o el misterio. Era pues, a su manera, un "hombre universal"
Hoy, el programa continúa, y ahora lleva además su nombre porque así lo han querido quienes han tomado el testigo de su mentor. Ahora, en cambio, no son 4 sino 3 las "ces" que discuten cada noche sobre la actualidad histórico-científica, pero todas impulsadas por el ánimo y la inquietud de quien desde el Parnaso de las ondas observa con su sonrisa sencilla el paso de la Historia.

3 comentarios:

velarde dijo...

Cebrián contribuyo a potenciar esa magia que tiene escuchar la radio antes de dormirte. El hecho de conseguir apagarla antes de cerrar los ojos es todo un arte dificil de conseguir. Sus pasajes de la historia son fenomenales, que pasión en el recitado..
Bien Alex, gente así no merece ser olvidada,¡buen cometido el de la logia!

AliciA dijo...

No lo conocía, pero se nota que sientes la pérdida.
Algo que no tiene nada que ver: ¿por qué el blog se llama La Logia 14?
Contestadme alguno, que me muero de curiosidad!!
No hagáis caso a Fer...
:(
... que soy una fiel lectora...

Fer dijo...

No desveléis el secreto...